Es real!!!, el encuentro amoroso entre seres humanos simplemente detona sensaciones, emociones, percepciones y creencias que provoca en nosotros el profundo deseo de brindarnos mutuo bienestar. Se vive como placentero el hecho de compartir lo que se es, y de disfrutar plenamente lo que se grabará, como una huella profunda, en la memoria corporal, psicológica y mental de nuestras esencias vivas.
¿Te ha sucedido disfrutar de cerca a una pareja, a un grupo de niños jugando, o a un grupo familiar o de amigos que se encuentran reunidos en una profunda alegría y bien estar?, ¿y te has contagiado de aquellas emociones tan placenteras? La verdad es que a mi me ha sucedido muchísimas veces!!!
Atestiguar este tipo de encuentros es innevitable, las risas, la alegría, la ternura, la solidaridad, el cariño, el calor humano, la espontaneidad, se sienten tan cercanos a mi como si atravesaran mis células y termino por contagiarme de las emociones de aquellos encuentros, y en esos días simplemente veo el mundo de otra forma!!! Y cuando veo al mundo de la forma que aqui relato, me dan ganas de hacer Amor, de hacer cosas amorosas que simplemente me hagan sentir mejor y contagien de bienestar a las personas con las que me encuentro y disfruto con su compañía. Incluso otras veces me cacho disfrutando tanto de un encuentro con mis seres queridos que terminamos por contagiar Amor a los que están a nuestro alrededor!!!
Es ese contagiarse y contagiar de Amor lo que CREO se posibilita como una poderosa forma de transformar las relaciones entre nosotr@s, y hacer de este mundo un lugar mejor para vivir, y si vamos mas allá incluso hasta podemos reivindicarnos con la Madre Naturaleza actuando decisiones civiles mas bondadosas con sus recursos, que para hacerlo simple son gracias a esos recursos de los cuáles se posibilita existir!!!
Si observamos con profunda atención descubriremos que la vida cotidiana está llena de actos de Amor, por todos lados se están multiplicando!!, a mi se me ocurre compartirte algunos de los que he experimentado...
Cuando expreso con libertad lo que siento y lo que pienso me estoy expresando en Amor… Cuando te lo comparto para hacerlo colectivo estoy haciendo Amor…
Cuando me dan ganas de crear y ofrecer bienestar a otras personas además de a mí misma estoy creando Amor…
Cuando crezco a través de las experiencias de estar en pareja es porque juntos hacemos de cada experiencia un reflejo de Amor…
Cuando corro tras el camión colectivo para entregar la basura separada y lista para reciclar estoy haciendo un acto de Amor…
Cuando abrazo un árbol celebro el Amor…con él…y con todos los que están conectados a través de sus raíces…
Cuando he sonreído en la calle a personas que se ven preocupadas, enojadas o tristes he hecho Amor…
Cuando la vida me sorprende regalándome la amistad de seres humanos entrañables, es una amistad con un rico sabor a Amor…
Cuando elijo guardar silencio para callar palabras hirientes u ofensivas a causa del enojo o la frustración definitivamente regalo Amor…
Cuando logro ver que la agresividad de un ser humano representa la coraza de una profunda trsiteza estoy viendo Amor...
Cuando voy por la calle y decido levantar una colilla de cigarro al bote de basura para evitar la contaminación de muchos litros de agua, estoy haciendo Amor…
Cuando he acompañado a sanar a pequeñas aves que por accidente llegaron a mi casa, en ese entonces sané con Amor…
Cuando me ha tocado liderar procesos de contratación de personas y les retroalimento en la entrevista estoy dando Amor…
Cuando regalo cosas físicas que ya no me son útiles y que alguien más las necesita para vivir, justo ahí sucede el Amor…
Cuando celebramos con abrazos el encuentro en familia, y compartimos entre anécdotas, historias y risas, nos descubrimos creando Amor…
Cuando me duele el corazón y se lo comparto a quien amo, y nos miramos a los ojos mientras sucede, entonces recibo Amor…
Cuando me levanto en las mañanas para preparar un rico desayuno que disfruto compartir con el hombre que duerme y sueña conmigo nos alimentamos con Amor…
Cuando hago lo posible por comprar los consumibles de la casa en los clásicos, populares y folklóricos mercados para evitar las envolturas inservibles y contaminantes de los supermercados, en verdad que es un acto de Amor…
Cuando ir al súper ha sido inevitable y cargo con todas las bolsas reciclables para evitar que bolsas de plástico lleguen a nuestros botes de basura también de esa forma procuro Amor…
Cuando le soy fiel a mi profunda necesidad de Crear equivale a crear con Amor…
Cuando intento cambiar al mundo, y de pronto las circunstancias me recuerdan que es el mundo el que me inspira a cambiar lo que soy, entonces me cacho pulsando Amor…
He escrito este relato en honor al Solsticio de Verano que justo hoy celebramos!, pues se trata de una oportunidad más para VER a la Naturaleza, y darnos cuenta que de ella se desprende una inagotable sabiduría a la que tenemos acceso cada ciclo. Déjate contagiar de un hermoso amanecer, de los rayos luminosos de una luna llena, del canto de los pájaros que habitan en los árboles cerca de tu casa y de tu trabajo, del aire que respiras a cada momento, de los rayos del sol que calientan tu piel, de la lluvia que moja tus ventanas, del olor a tierra húmeda, de las nubes formando figuras en el cielo, de las flores del andador o parque más cercano, del fuego con el que cocinas tus alimentos, del agua tibia que sale de tu regadera, del vuelo de un grupo de aves, de los relámpagos que iluminan el cielo, de un paseo en el bosque o en la montaña, de la frescura de un río o manantial, de todo aquello que ella nos regala cada vez. Solo déjate tocar por la Madre Naturaleza, y tócala con Amor!
Y cuéntame...¿cómo te ha sucedido el contagio de Amor?
