martes, 14 de julio de 2009

Entre lo Público y lo Privado...



Si imagino que mi espacio privado es aquel que solo yo conozco de mí misma podría incluso referirme a él como Soledad, y si a mi espacio público lo imagino como aquel donde pongo el conocimiento de mi a la vista de los demás podría incluso referirme a él como Compartir. En este imaginar de pronto me pregunté ¿cómo experimento lo público y lo privado en la relación con mi pareja?, es decir, ¿cómo experimento la soledad y el compartir estando en pareja?...

Y me contesto que la relación que vivo ahora con mi pareja es un genial vaivén de lo privado a lo público, y viceversa. Es como si convivieran en el mismo espacio los monólogos que tengo conmigo misma y los diálogos que incluyen compartir esos monólogos que se detonan por las experiencias vividas con él. Incluso también vivo experiencias estando sin mi pareja que en muchos instantes reservo solo para mí, hasta que un día sucede algo que me provoca el querérselas compartir. En estas infinitas formas de estar es que me doy cuenta que entre más comparto lo que me sucede más nutrida me siento en la relación, y también me doy cuenta que entre más atento recibe mi compartir más ganas me dan de contarle lo que me sucede, y así se crea un maravilloso circulo virtuoso que hasta se antoja compartir con otros, justo como está sucediendo ahora…

Y… ¿Hasta donde es viable compartir nuestros monólogos con la pareja?, ¿Hasta donde se vale compartir con la pareja? Ciertamente esta es una decisión que a cada uno conviene elegir, en la conciencia de que la relación de pareja es un espacio disponible para crecer, y crecer en algún sentido significa conocernos más a nosotr@s mism@s. Desde este lugar la pareja se puede vivir como un espejo que ayuda a reflejarnos, refleja lo que decimos y lo que hacemos, incluso lo que callamos y lo que omitimos; son estos reflejos espontáneos, y en el mejor de los casos amorosos, la oportunidad de vernos a distancia, la oportunidad de descubrir algo de nosotros que ahí está y que si damos conciencia de ello podremos vivir el descubrimiento a favor…

Hoy día caigo en cuenta que entre más comparto con mi pareja más elementos de reflexión disponemos para dialogar y discutir, me doy cuenta que entre más compartimos recíprocamente de nuestro espacio de Soledad, más crecen las oportunidades para celebrar nuestras coincidencias y también crecen las oportunidades para hacer valer nuestras diferencias. Lo placentero es experimentar las cosas que nos suceden cuando conversamos de las cosas que nos suceden, por ejemplo, en infinitas ocasiones he recurrido a él para contarle experiencias de mi vivir cotidiano con la intención de que a través del diálogo sea mi aliado para descubrir distintas formas de ver…

Un día me di cuenta que mi pareja hace algo particularmente creativo para acompañarme en este proceso de Conciencia. Y entonces después de escucharme un buen rato me dice: ”A ver…vía láctea…planeta tierra…continente americano…¿ubicamos?...¿si?...ok…república mexicana…distrito federal…delegación tal…colonia tal…calle tal…casa tal…ok…¿vamos bien?…protagonistas tales…hecho tal…¿ubicamos?...¿si?...situación tal…variables tales…¿estamos?...etcétera”. Y así, de esta forma tan ocurrentemente divertida, con ademanes corporales y efectos especiales, comienza a desmenuzar detalladamente la situación y me inspira a visualizar la circunstancia en un contexto global donde poco a poco logro enfocarme en los elementos esenciales del mismo, y justo en este proceso de forma espontánea van surgiendo ideas que me ayudan a comprender la situación, mejor aún, comienzo a ganar perspectiva hasta lograr ver desde un lugar distinto, y ¡EUREKA! justo ahí es cuando surgen las soluciones. ¡Así de pronto, de forma práctica y súper divertida...!

Por eso es que con mi pareja me encanta hacer público lo privado, su forma de estar conmigo inspira mi curiosidad para seguir descubriendo más y más dimensiones de conocimiento, de nosotros mismos, de nuestra relación amorosa de convivencia, y del universo con el que nos relacionamos. Entre lo público y lo privado, entre la Soledad y el Compartir, lo que más disfruto son nuestras presencias, la presencia de él, la presencia mía, y nuestra presencia…

Y si concebimos que la Soledad es la agradable compañía de estar con nosotr@s mism@s, ¿tu cómo y con quién la compartes?...

P.D. Gracias a Isaac Contreras por crear con una idea la semilla de esta narración…

4 comentarios:

Anónimo dijo...

El punto final de esta relación de soledad y compartir se entrelazan, creo, en que la otra parte quiera entrar en tu soledad y querer compartir la suya, lo que daría como resultado el compartir. El compartir en un Arte de pareja...habrá un método para aprender a Compartir?...

ROx dijo...

Hola Anónimo!, gracias por compartir tu percepción,¿que si habrá un método para aprender a compartir?. Tal vez hayan miles de formas de compartir y de aprender a compartir como personas en el universo, lo valioso en sí está en nuestras ganas de compartir, un hombre sabio lo dijo en estas palabras: "en querer estar"...

Isaac Contreras dijo...

Hola Rox, muchas gracias por haber considerado el tema que platicamos.

Como siempre... tienes una excelente manera de expresar las ideas... Felicidades!

Saludos,
Isaac Contreras

ROx dijo...

Hola Isaac!, gracias por tu felicitación y por confiarme el tema propuesto, ello me inspiró a crear lo que has leido. Es así como en colectividad vamos haciendo cultura, con tu idea, con mi reflexión en relación a tu idea, y con la cadena de ideas que se van multiplicando con el compartir de esta lectura.

Un abrazo para ti!